Por: Valeria García.
La bicicleta es un vehículo que sirve como medio de transporte para muchas personas pero que también puede ayudarnos a todas y a todos a cuidar nuestra salud. Sus beneficios son variados y muy útiles para quienes quieran practicar en ella, movilizarse o todo lo anterior.
Por ello, aquí dejamos algunos datos que podrían ser interesantes y ventajosos para quienes ya la usan en su día a día, o para quienes recién lo harán o quieren aprender a usarla. Después de todo, nunca es tarde para andar en ella e incorporar su práctica en nuestras vidas.
-Mejora la cantidad de oxígeno que nuestro cuerpo puede absorber y procesar.
-Fortalece los músculos de las piernas, glúteos, espalda y abdominales.
-Reduce el riesgo de enfermedades cardiacas ya que el uso de la bicicleta también fortalece al corazón.
-Reduce el colesterol malo y los niveles de triglicéridos. Por supuesto, también esta recomendado el chequeo constante de los mismos con un doctor y la alimentación balanceada.
-Ayuda a mejorar la resistencia, el rendimiento y el aguante físico.
-Al usar la bicicleta, la sangre bombea por todo el cuerpo a mayor velocidad, lo que genera la producción de sustancia químicas como la endorfina, dopamina y la serotonina, que crean sensaciones de ánimo placenteras y de bienestar. Es un buen método contra estados de ánimo como el estrés o la tristeza.
-Este ejercicio ayuda a dormir y descansar.
-También permite mayor movilidad al desplazarnos a diferentes distancias, ya que reduce tiempos de traslado y tráfico.
-Además, es un medio de transporte que tiene un gran impacto en el medio ambiente ya que no genera contaminación.
Como puedes leer, hay muchas razones para poder ejercitarnos y/o trasladarnos por medio de la bicicleta. Todo esto teniendo increíbles beneficios en tu salud y hasta en el cuidado del medio ambiente.
Y tú, ¿ya utilizas la bicicleta?