OMG! “El camino de María” Parte II

El camino de María

🍁🌊🌴

¿A que renuncie? Renuncie a la “seguridad” de un trabajo estable.... renuncie a una vida de comodidades.... renuncie a tener mi propio espacio... renuncie a vivir en el caribe.... renuncie a todo por lo que una vez luche... pero sobretodo renuncie a la angustia de vivir en una sociedad tan injusta.

Renuncie a vivir como nos han dicho que se tiene que vivir y acepte ser el frijol negro en el arroz por vivir una vida con mas libertad.

¿A donde me fui? Me fui.... ni siquiera yo sé a donde partí, solo me fui a donde la vida me llamara y las oportunidades se me presentaran pero me fui a donde sabia que podría hacer una cosa con mas libertad... me fui a fumar marihuana... a donde fuera legal.

El pais de la hoja de maple me recibió y empece a vivir en libertad... llegue al aeropuerto, tome mi transporte al hotel, vi a mi amiga deje mis cosas y salí a fumar.... salí a la calle... y empece a fumar. Aunque siempre fue mi sueño admito que me mordía la trenza... no sabia si prenderlo así nada mas a la brava... pasaba gente que trabajaba en el hotel, familias y yo trataba de ocultarme... ¿como te quitas la maña de esconderte si lo has hecho por mas de 10 años?

Mi amiga solo decía: goey aquí es legal relax.... y me relaje y lo mejor, a nadie le importo, cualquier mirada ajena iba acompañada de una sonrisa y entendí que muchas cosas podrían pasar en este viaje y muchas cosas podrían pasar después pero no me había equivocado. Estaba donde tenia que estar...

Entonces busque una dulcería... de cannabis obvio... los famosos y hermosos dispensarios.😍🍁

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Disneylandia para marihuanos, admito que cuando llegue, empece a fumar con amigos pero la idea de una tienda en la que se vendiera marihuana era el sueño dorado.

Llegue a una plaza al medio dia, una plaza con todo tipo de comercios en una buena zona. El dispensario una tienda que por fuera parece bastante común, con ventanas verdes y anuncios neon, el nerviosismo de entrar y de saber lo que tenían me acompañó en todo momento pero era algo que iba a pasar, tenia que entrar.

Me introduje como si fuera a comprar pan, una tienda con anaqueles en los que veías los cogollos con su nombre su nivel de THC y los efectos que provocaba cada una, encontré grinders de todo tipo y tamaño, bongs, pipas, vaporizadores y mil cosas que no entendí para que servían, entre creyendo que lo sabia todo y resulto que no sabia nada.

Después de 10 años fumando mis tristes conocimientos eran que había cannabis de la normal y de la chida, que el macho no pega (¡aprendan!) 🤣, que se puede hacer mantequilla; casi estoy segura que jamas vi un cogollo completo, siempre venía aplastada, en cambio en los anaqueles se mostraban flores perfectas, de fotografía. Flores que brillaban de tantos cristales que tenían.

Tantas clases de weed tan diferentes una de la otra, el verde combinado con morados, naranjas, blancos, diamantes perfectos.

Y entonces vino la realidad la compra. De todas las clases que había solo conocía una y pues esa compre “Blue Dream”. 

Mi sueño azul se desvaneció cuando me dijeron que vendían solo 3.5 gramos y yo así de queeee?!? Amigo estoy acostumbrado a comprar dos onzas por quincena y me quieres vender 3.5 grs?!?, despues vi el precio y dije ah si 3.5 grs es perfecto jaja. 

Llegue a mi campamento y me rolé, fueron los mejores 3.5 grs invertidos en mi vida. La calidad de la flor tenia una diferencia enorme a lo que había fumado por 10 años. Tenia un sabor y un olor tan peculiar que podría haberlo usado de perfume. 😲 Sabia q había encontrado mi lugar. Comencé a visitar diferentes dispensarios y me encontré con realidades diferentes. 

Cuando me movi a una ciudad grande, hubo una gran diferencia empezando por que en estas me encontré filas de gente esperando afuera a ser atendidos, pasaban las horas y la fila no terminaba incluso la gente esperaba aun sabiendo que tal vez no alcanzarían a entrar antes que cerrara la tienda. Me encontré con que había seguridad uno o dos dependiendo de que tan grande fuera el local. Pasabas por detectores de metales, mostrabas tu identificación y en algunas ocasiones te hacían firmar una carta responsiva. Una vez pasando los filtros te encontrabas con lineas de cajas registradoras, atras los anaqueles con las flores, pantallas con todas las variedades y precios, sour diesel, mango kusk, skywalker, girl scout cookies, gelato, double sour diesel, mac 1, GMO entre otras tantas que no podría recordar. Todo era una transacción bastante rápida ya que había demasiadas personas esperando pero lo más hermoso era salir de ahí, salir con la mayor de las sonrisas y salir a disfrutar tu compra.

Los efectos: felicidad absoluta, magia mística, amor, vibraciones de paz.

Suena raro y tal vez para los no creyentes o para los que no vibran chido con la weed pero para mí eso fue.

Empece a curar heridas que venia cargando y estaban apagándome.🥺

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Continue mi viaje con rumbo a una de las mecas de Mary Jane. California, el estado donde las oportunidades para los inmigrantes son abundantes, donde la mitad de su población entiende o habla español, el estado de las montañas, las playas, los ríos, bosques y hermosos atardeceres y tanto halago es solo porque es el paraíso de marihuana. Cannafornia o Calinnabis. 🤩😎

Mi primera parada, busque mi hostal deje mis cosas y salí a buscar un dispensario.

No me costo mucho trabajo, a dos cuadras de mi hostal encontré uno con excelentes reseñas.

Misma mecánica, seguridad, identificación y firmar la responsiva. Y ya saben ahí va doña Vergas según ella con todo el “conocimiento adquirido” en un mes jaja. Hice lo propio la compra regular 3.5 gramos de una que había probado y me había gustado, sour diesel. 

Le pregunte al chico que me atendió que dónde podría fumar cerca de ahí, me dijo que a la vuelta encontraría un parque donde estaría con tranquilidad.

Me dirigí envuelta de felicidad a degustar mi preciada adquisición. Mi forma favorita de fumar es en porro, tengo pipas, bongs y otros artefactos para fumar pero lo mío lo mío es el porro. Cuando llegue al parque con toda la emoción de forjarme uno me tope con la sorpresa de que el parque esta lleno de gente sin casa los famosos “homeless”, acampaban alrededor del parque gritando y buscando a la gente que pasaba para obtener dinero y cualquier cosa, muchos de ellos estaban bajo los efectos de estupefacientes horribles.

El temor de que cualquiera pudiera acercarse estaba latente y no por ser clasista pero la realidad es que muchos de ellos padecen de enfermedades mentales combinados con las drogas suelen ponerlos en un modo agresivo.

Decidí no rolar pero ya no podía esperar a fumar, me senté en un árbol a la mitad del parque esperando que nadie me molestara, saqué mi pipa y la rellene un poco decepcionada de no poder fumar un porro y entonces empece a quemar, oh mi Dios! Tres fumadas y yo estaba en el nirvana, abriendo las puertas de un mundo que solo existía en mis sueños y que los excedió por mucho.

Era la bienvenida, a el mundo de una libertad absoluta, no solo de poder fumar sino de vivir sin ataduras ni expectativas que llenar, de poder tomar el tiempo libre donde y cuando quiera. La libertad de quitarme reglas y salir de un sistema que me hacia miserable, me abrió la oportunidad a conocer personas que nutrieron mi mente mi alma y mi corazón. Era el inicio de aprendizaje de un conocimiento que mi alma estaba buscando.